Pues sí, todo eso hicimos. Me canso nada más que de escribirlo.
Y no es que hayamos tardado tanto en hacer una nueva ruta es que cuesta ponerse ante el ordenador y dejar constancia de ello.
Descendemos hacia el cortijo de Pradomira.
O esta tinada.
Ascendiendo a la Sima |
Árbol en la pared |
Y acabamos donde empezamos: en la Peña de la Cabeza.