domingo, 22 de enero de 2012

SUBIMOS A LAS CABRAS

Hubo cambio de planes. Cambiamos La Sagra por las Cabras. Y no es que nos confundiéramos de nombre (que ya sé que se parecen), sino por cobardicas.
Bueno, la cosa es que subimos por la cara sur a Las Cabras, bien pertrechados y entonces descubrimos que habíamos olvidado la cámara de fotos.
Menos mal que hay móviles por el mundo, y aunque con poca calidad, pudimos dejar constancia de que conseguimos el objetivo.

Empezamos la ruta, bien equipados con abrigos, guantes, bragas, .... Porque estaba nevado, es Nerpio, estamos a más de 1500m. y subimos a los 2000m., y nos encontramos con que nos sobrada todo. Hizo un calor.... ¡Qué clase de tiempo es este!

Empezamos la marcha perdiéndonos. Parece mentira con la experiencia que ya tenemos.

Primera parada de unas pocas. Y es que como decía Luisete "¿Qué es lo que está pasando?" EStá claro que estábamos algo oxidados. Hay que hacer más rutas. No hay otra solución.

 Menos mal que paramos a almorzar, porque si no, no llegamos.
Y venga a comer.

La bebida también ayudó. ¡Dios bendiga la bota de MAnolo! ¡Y el vino que contenía!


Y aún así se preguntaban, "¿dónde tenemos que subir aún?" "¡Ay ca! ¿Todavía tenemos que subir ahí arriba?" ¡Qué ilusos! ¡No quedaba todavía na ni na!

Que sí que eso es La Sagra. Que ya subiremos. Que hay tiempo para todo.

Imaginad en lo que está pensando Fernando.
Exacto: "Yo tendría que estar ahora ahí"

Otra parada. No hay nada como una siestecita en la nieve. Aunque el culete quedó un poco perjudicado.

Y llegamos.

Por lo menos al pico Calderón, a 2070 m.

Y llegamos todos.

Y luego unos pocos intrépidos nos atrevimos a ir al geodésico de las Cabras. Aunque hubo algún "esfarre" y alguien perdió una zapatilla (que eso de ponerse botas no va con él).

Y también llegamos.

Y Llegamos todos. Unos más contentos y orgullosos que otros (que están más sobraos).


Así que nuevo reto conseguido.
Chicos, que hemos subido a la zona más alta de la provincia de Albacete.
 De aquí llegamos a cualquier parte.
Incluso a La Sagra.






sábado, 7 de enero de 2012

SUBIDA AL CUJON

¡Qué hermosa ruta!
¡Qué cansancio! Estoy que no me tengo. Y mañana a la aceituna.
Iniciamos ruta y como se ve, un poco oxidados. Nos costó después de la convalecencia de Fernando chico y de las Navidades empezar con ritmo. Hasta las chicas se quedaban atrás cada dos por tres, y más de una vez tuvieron que echar una carrera para pillarnos.

Nada más empezar encontramos cosas interesantes que ver.
Ahí están los restos de la resinación en la sierra del Cujón. Todavía están clavadas las medias lunas y los clavos donde se colgaban las macetas donde caía la resina que luego recogían los remansadores.

 Es el pino negral o pinus pinaster de donde se saca la resina.

La ruta está marcada con paneles del PArque Natural de los Calares que explican el paisaje que recorremos. El que más gustó a los chicos fue el segundo que les permitió inspeccionar la falla.

Siguiendo las indicaciones del panel buscamos los puntos que marcaban en el plano de falla.

 Encontramos la falsa ágata de las paredes y las marcas de agua de los antiguos lagos subterráneos.



El panel 3 fue también interesante. El otro panel estrella de la marcha.

 Pensar que ahí debajo todo está hueco...  
Ahí también está la mini-linterna de Manuel (qué buen regalo de Manuel de Esther) buscando las grietas y aberturas.
Por fin encontramos un sitio magnífico, con magníficas vistas, para descansar y almorzar. Vistas a todo Riópar.

Ya ahí encontramos a nuestro Tejo Viejo.






 Y por fin llegamos a la caseta de la Celada.



Y como no, el paisaje ha sido espectacular.
Manuel ensimismado.


FErnando ensimismado.

Padre e hijo ensimismados.
Y Abajo, andando entre lapiaces. Mira que es difícil andar por ahí.
Y aunque de otra sensación no nos cansamos tanto. Que no hombre, que no. Que no fue para tanto.
Cosas curiosas que vimos:
El nido para pájaros.


Mariquitas
ES curioso que con el tiempo que tenemos encontraramos este charco helado. No había manera de acabar con él. Y mira que pusieron empeño. Solo hay que mirar a Fernando.
Y esto fue lo que dio la excursión de sí.
La próxima sera a la Sagra.
Que Dios reparta suerte.